Soflamas de "talante"

Tuve la “suerte” de conocer transcrita una de las soflamas del Sr. Zapatero en uno de esos mítines encaminados a aleccionar a sus acólitos candidatos de las próximas elecciones autonómicas y municipales en relación con las directrices que habían de guiar sus respectivas campañas, como si realmente la campaña que él dirigió en el año 2004 de cara a las generales hubiera tenido algo que ver con su victoria. ¿Amnesia quizá?

Aparte de comparar las elecciones con una batalla y sus consejos de que mejor era repetir un mismo mensaje cinco veces que dos un par de veces cada uno, basado quizá en su concepción de que los españoles somos tontos, se dispuso a hacer alarde de buenas maneras y responder que a los “ataques” de la derecha iban a responder con buenas palabras; es posible que tenga un concepto de “buenas” distinto al que tenemos el resto de los españoles por lo que hemos podido comprobar posteriormente. Esto debe de ser como lo del talante, que a falta de talento fue tan sólo una nota discordante en su vacuo discurso.

Y es que tras su soflama hemos podido comprobar un cambio notable en el respeto hacia el centro-derecha. Por un lado, en los cuatro primeros días de campaña fueron atacadas hasta 8 sedes del Partido Popular; por otro lado, he tenido, y como yo tantos otros, que sufrir los insultos de una Vicepresidenta que parece ser que eso, insultar, es lo único que se le da bien.

Afirmaba ésta que ser de derechas y joven es ir “contra natura”. ¿Con qué tipo de aberración me está comparando, Sra. Vicepresidenta? ¿Es que acaso en una democracia no se puede tener 20 años y defender el liberalismo económico, la Constitución, la independencia de la justicia, la dignidad de las víctimas del terrorismo, una inmigración legal y ordenada, la integridad de la Nación única española…? Si eso es ir “contra natura”, a mucha honra. Sólo le agradecería que tanto usted, como la que quiere colgar de la catenaria a la Sra. Aguirre o tenderla en las vías del tren, así como aquella que pegaría dos tiros cada mañana a dos personas de derechas y todos sus incultos acólitos que vinculan ser amante de la libertad, como lo somos los votantes del Partido Popular, partido que abarca el centro-derecha, con ser unos fascistas, recogieran sus bártulos y se fueran de una España que, como ésta, nada tiene que ver con la de la Guerra Civil que parecen añorar y cuyos aires de democracia y de libertad amparan a todos los ciudadanos con independencia de su ideología, todos ellos españoles en la misma medida.